El mercado venia de un volumen de producción récord durante el ciclo 2011/12, de 40,64 mill./t y un volumen de industrialización también récord (36,65 millones). Se proyectan ahora una producción de 40 millones y una molienda de 35,87 millones, en ambos segundas mayores marcas históricas.
El bloque de países de la ex Unión Soviética, con Rusia y Ucrania como líderes mundiales, vuelve a consolidar el primer puesto como productor de girasol, con 20 millones de toneladas, el 50% de la producción mundial. La UE, con casi 8 mill./t, aporta el 20% de la producción global. La Argentina, con un volumen estabilizado en 3,4 mill./t, se consolida como el tercer exportador mundial, tanto de aceite como de harina. El aceite se ha ido valorizando y hoy se cotiza con una prima de US$ 180 por tonelada por sobre el valor del aceite de soja en el mercado CIF Rotterdam.
En el mercado FOB puertos argentinos, la prima del aceite de girasol sobre el de soja es de US$ 140. Esta tendencia le da al mercado ciertas chances de mantener sus precios en la nueva cosecha, con valores muy similares a los de la cosecha actual.
Veamos cómo se proyecta la nueva cosecha de girasol 2013/2014, comenzando con el análisis de la zona de producción más temprana, el Chaco, que produce el girasol primicia que ingresa en el mercado entre diciembre/enero. Esta provincia, al igual que otras en el NOA, viene de dos años seguidos con sequías afectando en forma más que significativa los cultivos de soja principalmente, con fuertes quebrantos económicos.
En el caso del girasol, en el Chaco se cosecharon en el ciclo 2012/2013 unas 370.000 hectáreas, con un rinde promedio de 17 qq/ha, según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. Para analizar el margen bruto vamos a tomar un precio hipotético de US$ 330 por tonelada para la posición futura diciembre 2013, para el girasol que específicamente proviene del Chaco.
Con ese valor "hipotético" y un rinde potencial de 20 qq/ha, el margen bruto arroja un valor de US$ 260 por hectárea. Considerando el fracaso de la soja en las últimas dos campañas, el girasol aparece como un cultivo estratégico para los productores del Chaco, dando oxigeno financiero para fin de año, hasta el ingreso de la soja, en abril y mayo.
Si las condiciones climáticas mejoran el perfil de humedad de los suelos durante el otoño y mitad del invierno, la superficie de girasol en esta provincia podrá llegar a superar las 500.000 hectáreas. Queda como factor determinante para los precios futuros el clima durante la primavera y el verano y su efecto sobre la evolución de los cultivos en Europa.
En contraposición, vemos que el mercado de soja en Chicago continua consolidando una caída de US$ 80 entre las posiciones futuras lejanas, enero 2014, y la posición cercana, julio 2013. Esta caída se sigue sustentada en una favorable evolución de los cultivos en EE.UU. y en un volumen de producción probable de 90 a 92 mill./t.
Si los estadounidenses cumplen con este objetivo de producción, no es improbable que la baja de Chicago se consolide y arrastre los precios de la soja en la Argentina. En este escenario, un valor de soja mayo 2014 de US$ 250 no se puede descartar. Por el contrario, un problema climático que afecte negativamente los cultivos en EE.UU. tendría un efecto alcista en el mercado. En ese caso, no se descarta una soja de US$ 350. Como vemos US$ 100 es el péndulo que veremos en el mercado en los próximos meses, donde todo dependerá del clima.