En medio de las turbulencias de la economía interna y la pelea contra los holdouts, la mayor láctea argentina logró refinanciar a seis años sus vencimientos de deuda, que comenzaban el año que viene, y fondearse a una tasa barata dentro del actual contexto.
Mastellone consiguió u$s 200 millones y se convirtió así en la segunda compañía en lograr una colocación internacional en el año, detrás de la nacionalizada YPF.
La compañía fundada hace más de 80 años logró salir airosa en el proceso de canje y recompra de acciones que lanzó a mediados de junio, y logra oxígeno en un año complicado, de alta inflación, retracción de las ventas en el mercado interno y difícil acceso al crédito.
La compañía, que vende más del 65% de la leche fluida que se consume en el país, informó a la Bolsa que en el marco de la emisión de obligaciones Clase F y de la oferta de compra y canje, la compañía procedió a la emisión de u$s 199.693.422 obligaciones negociables Clase F, con vencimiento en el año 2021. De esta manera, aseguró que se ha cancelado totalmente la deuda por Obligaciones Negociables Series B y C, con vencimiento en 2018, y préstamos a tasa fija con vencimiento en 2018.
En paralelo, la firma que tiene su sede de operaciones en General Rodríguez, en la provincia de Buenos Aires, indicó que ejerció el derecho de recompra prepago y/o recompra del resto de sus obligaciones negociables Clase A con vencimiento 2018 y Clase D con vencimiento 2015, como así también de la deuda a tasa variable con vencimiento 2015 que no hubieran ejercido sus derechos bajo la oferta de compra y canje.
Muchos de los papeles que fueron canjeados por las nuevas ONs con vencimiento en 2021 provienen de la última reestructuración de deuda realizada por Mastellone en 2010, cuando las complicaciones económicas casi logran que la firma, emblema nacional, cambiara de dueños.
La dueña de la marca La Serenísima, entre otras, aseguró que el dinero le servirá para capital de trabajo y completar inversiones. Mastellone facturó $ 9.400 millones el año pasado, pero su balance final cerró con un rojo de $ 37,8 millones. En paralelo, en el primer trimestre de 2014 perdió $ 160 millones, un pasivo 10 veces superior al del primer trimestre del año pasado.
La suba de costos es uno de los factores que golpearon a la empresa, porque la retracción del consumo hace que sea aún más difícil trasladar los mayores costos de insumos y servicios a los precios, ya sea dentro como fuera del plan oficial de Precio Cuidados.
Al igual que hizo en su anterior reestructuración, Mastellone contrató a Merril Lynch, para que actúe como entidad colocadora principal en Estados Unidos junto a Deutsche Bank Securities. También contrató a Bondholder Communications Group para que actúe como Agente de Información y Canje, y al Banco Santander Río, como Agente Administrativo.
Julieta Camandone