El ex ministro de Economía Roberto Lavagna aseguró hoy que “la situación económica de Argentina está compleja” ya que hay “una pérdida del poder adquisitivo muy fuerte en la población”, y advirtió que se cumple “el séptimo año de inflación alta” producto de la necesidad de financiar gasto público “con impresión de billetes”.
“Hay que hacer un programa económico integral, donde juega mucho las expectativas y la calidad institucional: qué ocurre con la Justicia e incluso la política exterior. Hace falta hacer un cambio integral” en materia de política económica, manifestó Lavagna a DyN en su recorrida por los boxes de la Rural de Palermo 2014.
Añadió que ve “un proceso de deterioro muy rápido (de la situación económica y social), principalmente en los grandes centros urbanos, Gran Buenos Aires, Gran Rosario y un poco menos en Córdoba, ya que, según la Universidad Católica Argentina, se habla de un 28 por ciento de pobres”.
“¿Sobre el tema deuda? Sobre eso nada (que decir) cuando el gobierno argentino está negociando. Hay que evitar crear cualquier dificultad. Está en manos del Gobierno, ya habrá tiempo para decir lo que uno tenga que decir. ¿Lo dejamos ahí?”, aseguró Lavagna a una pregunta de esta agencia sobre las tratativas que se encararán mañana ante tribunales de Nueva York. Consultado sobre la tónica recesiva que experimenta la economía local, el ex candidato presidencial explicó que “la situación de la economía está compleja y se observa una pérdida muy fuerte del poder adquisitivo de la población, y se suma algo que tiene un componente psicológico que es el miedo a perder el empleo”.
Por ello, Lavagna indicó que “tenemos un segundo semestre complicado” y consignó que en el caso de la soja, la caída que experimenta el precio internacional producirá “una pérdida de 1.000 millones de dólares” de divisas para la Argentina.
Respecto a la posibilidad de que se produzca una nueva devaluación como la registrada en enero pasado, el economista -hoy vinculado al sector del Frente Renovador que lidera Sergio Massa- expresó que “devaluar sin hacer nada en materia de política antiinflacionaria no sirve de mucho, simplemente se crea un espiral de precios y salarios, donde los que pierden son los salarios, los jubilados y los pensionados”.
“Antes de hablar de cualquier tipo de devaluación, hay que hablar de cómo se pone en marcha verdaderas políticas de freno a la inflación. El gobierno de Cristina Fernández no lo hace porque no termina de reconocer que hay inflación, la que empezó en el 2007 y hoy estamos en el séptimo año de inflación alta”, dijo.
Lavagna agregó que “en los últimos siete años se pasó de un superávit a un déficit muy importante de las cuentas públicas, primero se financió con recursos de la ANSES y banco oficiales, y ahora se financia con impresión de billetes”.