Las empresas que quieran importar o pagar servicios, con el nuevo sistema que comienza a regir este lunes y se extiende por 90 días, deberán financiar las operaciones con dólares propios, tomar créditos internacionales o financiarse con apalancamientos de las casas matrices.
Según informa Ámbito Financiero en su edición impresa de este lunes, el Ministerio de Economía aseguró a las empresas que acepten el nuevo régimen tendrán una liberación inmediata de las importaciones agilizando las declaraciones juradas. El secretario de Comercio Interior, Augusto Costa, aclaró que las pequeñas y medianas empresas, por ahora,quedarán fuera del régimen si producen en el país y acreditan de forma fehaciente que las importaciones reclamadas son necesarias. Si, en cambio, la pyme sólo se dedica a la importación estará fuera de cualquier prioridad para recibir dólares de las reservas del BRCA.
El plazo de 90 días encuentra un explicación: el 12 de mayo, la fecha en la que terminaría, ya habría culminado el período donde los productores sojeros deben liquidar para prepararse para las próxima cosecha.
Una variante del régimen permite que las empresas que demuestren capitalizaciones e inversiones en dólares puedan comprar bienes y contratar servicios por la misma cantidad de divisas.
Con esta nueva operatoria, el BRCA buscará retirarse del aporte de divisas para pagar las compras al exterior y concentrarse sólo en presentar las reservas.
