En lo que va de 2014 todos los sectores generadores de divisas –con el agroindustrial a la cabeza– generaron una menor cantidad de recursos y, ante la imposibilidad de acceder al financiamiento internacional, muchas empresas consumidoras de dólares debieron realizar un ajuste.
En los primeros nueve meses de 2014 el ingreso neto de divisas (cobros por exportaciones – pagos por importaciones – utilidades giradas al exterior) generado por los sectores “oleaginosos y cereales” y “otras actividades primarias” fue de 22.510 millones de dólares (M/u$s) versus 23.324 M/u$s en el mismo período de 2013.
En segundo lugar se ubicó el sector “alimentos, bebidas y tabaco” con 4243 M/u$s ingresados en enero-septiembre de este año versus 4597 M/u$s en el primer semestre de 2013. Los datos corresponden al último Balance Cambiario publicado por el Banco Central de la República Argentina (BCRA).
El tercer lugar del ranking fue para el sector minero con divisas netas ingresadas en los primeros nueve meses del año por 2447 M/u$s contra 3024 M/u$s en el mismo período de 2013.
Y en cuarto lugar figura el ítem “Servicios empresariales, profesionales y técnicos” (que comprende asesoramiento jurídico, contable, publicidades, programación y un largo etcétera) con ingresos netos por 1811 M/u$s versus 2157 M/u$s en enero-septiembre de 2013.
Los demás grandes sectores de la economía argentina consumen muchísimos más dólares de los que generan y son “subsidiados”, en términos cambiarios, por el sector agroindustrial.
El mayor ajuste cambiario lo realizaron dos sectores. En enero-septiembre de este año el sector automotriz necesitó “absorber” divisas por 2313 M/u$s versus 5725 M/u$s en el mismo período de 2013, mientras que el turismo consumió 3907 M/u$s contra 6465 M/u$s en los primeros nueve meses del año pasado (ver planilla).
El ajuste también se registró en el sector comercio (-3786 M/u$s versus 4364 M/u$s) y la importación de maquinaria y equipos (-4304 M/u$s contra 5394 M/u$s).
Los datos reflejan que, de aquí en más, la economía argentina necesita crear nuevas fuentes generadoras de divisas para poder desarrollarse. Los caminos para lograr tal propósito son múltiples: van desde generar condiciones para atraer grandes inversiones externas hasta promover el ahorro energético (con mayor uso de biocombustibles) y mejorar el acceso a mercado de productos o servicios en los cuales somos competitivos en términos internacionales.
El déficit energético reconocido por el gobierno nacional en enero-septiembre de este año es de5184 millones de dólares (producto del desmantelamiento de la matriz energética registrado en la última década).