• Al disiparse “El Niño” que afectó a la primera parte de la campaña agrícola 2012/2013, el Océano Pacífico pasó a observar un estado “neutral frío”, que hace suponer que la temporada 2013/2014 podría experimentar la influencia de un episodio débil de “La Niña”.
• Se mantiene el calentamiento de las porciones norte y ecuatorial del Océano Atlántico. Este fenómeno conocido como “Oscilación Multivariada del Océano Atlántico (AMO)”, tiene varios efectos conocidos, favoreciendo la generación de huracanes y fuertes precipitaciones sobre la costa atlántica de los EE.UU., a la vez que provoca sequía en el interior de ese país. En lo referente al Continente Sudamericano, sus efectos no ha sido estudiados en profundidad, pero se piensa que produce un efecto similar.
• El Atlántico Sur también presenta áreas con temperaturas superiores a lo normal, especialmente frente a la desembocadura del Río de La Plata, que promueven precipitaciones costeras.
• En la escala regional, la extensa área con anegamientos en las cuencas de los ríos Salado y Quinto dejada por “El Niño”, se redujo moderadamente debido al calor y la pausa en las lluvias observados durante Enero, pero podría volver a crecer si lo que resta del verano y el otoño volvieran a experimentar lluvias localizadas.
Debido a esta particular combinación de factores, la pausa en las lluvias, que suele presentarse durante el mes de Enero, comenzó en forma anticipada, extendiéndose desde Navidad hasta fines de ese mes, siendo acompañada por fuertes calores, lo cual determinó una reducción general de las reservas de humedad de los suelos.
Por lo tanto, la reactivación de las precipitaciones durante Febrero será de capital importancia para que el potencial productivo de los cultivos pueda lograrse.
CONCLUSIÓN
El complejo conjunto de factores antagónicos que contralan la marcha del clima continuará provocando fuertes perturbaciones:
• Se producirán lapsos con vientos del norte, durante los que se registrarán fuertes calores, los cuales se alternarán con cortas pero intensas irrupciones de aire polar. Hacia principios de otoño, dichas entradas de aire frío podrían empezar a causar heladas en el sudoeste de la Región Pampeana. En Mayo, dicho riesgo se extenderá a gran parte del área agrícola nacional.
• Los lapsos de intensa actividad pluvial se alternarán con períodos de escasa actividad, en los cuales predominarán condiciones de calor y tiempo seco.
• Por el momento no se observa un riesgo significativo de heladas durante Abril, pero las mismas llegarían con fuerza a partir de comienzos de Mayo.
Aunque existen indicios de que la campaña agrícola 2013/2014 podría ser afectada por un episodio débil de “La Niña”, el calentamiento del Océano Atlántico, provocado por la “Oscilación Multivariada del Océano Atlántico (AMO)”, podría compensar dicha influencia negativa, dando un régimen climático cercano a lo normal, aunque muy variable.
Ing. Agr. Eduardo M. Sierra