En Santa Fe y Entre Ríos los impuestos le dan la bienvenida al 2014

En Santa Fe y Entre Ríos serán nuevamente los empresarios agropecuarios los encargados de pagar los ajustes por inflación de los salarios del personal público de ambas provincias.

La semana pasada legisladores de los diez sub-bloques del PJ y del PRO que integran la Cámara de Diputados de Santa Fe –según indicó un artículo de Elciudadanoweb.com– decidieron aprobar el impuestazo solicitado por el gobernador socialista Antonio Bonfatti (que en el Inmobiliario Rural implica un aumento acumulado en los últimos tres años superior al 400%).

La aprobación se realizó sobre tablas –sin debate– en una sesión que duró menos de media hora. Los legisladores no aceptaron, tal como pretendía Bonfatti, crear de un nuevo impuesto que, si bien pretendía gravar el procesamiento de granos, estaba disfrazado de tributo ambiental.

Esta semana, también sobre tablas, los legisladores oficialistas entrerrianos aprobaron el impuestazo promovido por el gobierno de Sergio Uribarri. Se trató de un trámite exprés: el martes se aprobó en Diputados y a las 00.20 horas del miércoles el Senado completó la sanción del proyecto, según indicó recintonet.com.

El impuestazo entrerriano incluye la creación de un adicional del 20% al 30%, según la zona, del Impuesto Inmobiliario Rural. En Ingresos Brutos se eliminó la exención al sector primario e industrial –que pasarán a estar gravados con una alícuota del 1%– y la exención del 50% a las cooperativas

Además se aplicará a partir de 2014 una alícuota del 5% de Ingresos Brutos para empresas que produzcan en Entre Ríos pero tengan sede en otra provincia, una alícuota del 3% y 4% para prestadores de servicios agropecuarios entrerrianos y extra-provinciales respectivamente, y una alícuota del 2,5% y 5,5% para arrendamientos agropecuarios realizados por entrerrianos y extra-provinciales.

En ambos casos los legisladores justicialistas –que son oposición en Santa Fe y oficialismo en Entre Ríos– decidieron dar curso al impuestazo con la intención de aumentar la disponibilidad de recursos tributarios en un marco de creciente tensión social (que en los últimos días provocó saqueos, desmanes y muertes en muchas ciudades de diferentes regiones argentinas).

Los impuestos nacionales y provinciales se quedan con 73,6 pesos de cada 100 pesos de renta generado por una hectárea agrícola argentina promedio, según el Índice Fada.

La inflación, producto del gasto excesivo del gobierno nacional combinado con una súper emisión de pesos sin respaldo, viene licuando de manera significativa el salario real de la mayor parte de los trabajadores argentinos.