La cadena de ganados y carne bovina mostrará el año próximo algunos cambios en sus indicadores. Según el último informe del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (Usda), la producción de carne bovina se proyecta en 2,68 millones de toneladas, el volumen más bajo en los últimos cuatro años, debido a una caída en el número de bovinos faenados. El reporte precisa que se espera que más animales se terminen con granos (en feedlots), aprovechando los precios favorables de los cereales y la oportunidad de agregar valor a la producción de maíz.
El menor nivel de faena proyectado se fundamenta en una retención moderada de hembras (terneras, vaquillonas y vacas) ya que hay expectativas de mejora en el sector ganadero.
Si bien se espera una menor producción de carne, una mayor cantidad de terneros nacidos aportará un aumento en el stock bovino nacional. Las existencias alcanzarían durante el año próximo a 53,2 millones de cabezas, el nivel más alto de 2008, según admite el Usda.
"Muchos agricultores que producen maíz o sorgo en zonas alejadas de los puertos están comprando hacienda para agregar valor a su grano y evitar una alta carga del flete que, en algunos casos, se llevan la mitad de sus ingresos brutos de grano vendido", observa el informe del organismo estadounidense.
A partir de esta consideraciòn, el Usda asegura que entre 70 y 80 por ciento del ganado vacuno en Argentina se termina en confinamiento con granos. Un nivel récord.
En cuanto a la demanda doméstica, el organismo estima que durante el año próximo se consumirán 2,4 millones de toneladas, el volumen más bajo desde 2011. "Las mayores exportaciones y una caída en la producción recortarán el suministro de carne vacuna en el mercado interno. Se prevé que el consumo per cápita caería a 56 kilos, frente a los 59 kilos en 2015.
Más allá de estas proyecciones, la realidad de la industria frigorìfica no es la mejor. Segùn el consorcio ABC, que agrupa a los principales frigorìficos exportadores del país, el sector ha perdido en el año tres mil puestos de trabajo y la situación podrìa agravarse en los próximos dìas, según un comunicado difundido por le consorcio industrial
Comercio exterior
A pesar de la menor producción de carne bovina, el frente externo para 2016 se mostraría más promisorio para los embarques de carne argentina. Según el Usda, las exportaciones de carne alcanzarían el año próximo un volumen de 280 mil toneladas, el nivel más alto de los últimos siete años,
"La mayoría de los exportadores sostiene que la nueva administración nacional, que asumirá el cargo en diciembre, introducirá cambios en las políticas que mejoren la competitividad de las exportaciones del sector", precisa el informe.
El Usda identifica a "una moneda local fuerte", "las limitaciones" para vender al exterior y "a los impuestos a la exportación del 15 por ciento" (retenciones), como las políticas que influyen en el desenvolvimiento actual del sector ganadero. "Gran parte de la industria espera que estas políticas se modifiquen dentro de los primeros meses", precisa el organismo estadounidense.
Dentro de estas expectativas favorables, los operadores esperan que las exportaciones argentinas de carne fresca a los Estados Unidos se reanuden a principios del año próximo.
Si bien hay incertidumbre sobre el estado de las futuras importaciones chinas, los operadores esepran que el país asiático continúe ampliando las compras argentinas durante el próximo año.