La guerra está desatada. Las fuertes restricciones a las importaciones que aplica la Argentina para cuidar los dólares y su industria disparó una catarata de reclamos por parte de varios países desarrollados ante la Organización Mundial de Comercio (OMC). Pero el Gobierno no se quedó quieto y también decidió lanzar su embestida contra esos países "también ante el órgano multilateral" por trabas que esos mercados imponen para el ingreso de productos nacionales.
Mientras, ya concluida la etapa de consultas, avanza en la OMC la denuncia realizada en mayo por la Unión Europea, Japón y los Estados Unidos hicieron ayer presentaciones en el mismo sentido por considerar que las medidas adoptadas por la Argentina "limitan las importaciones de bienes y establecen una discriminación entre los productos importados y los nacionales". A su vez, horas más tarde la Cancillería informó mediante un comunicado que denunciará a los Estados Unidos por sus prácticas proteccionistas, ya que el país "impide el ingreso de carnes y cítricos argentinos, violando las normas de la OMC". Y lo mismo haría con Japón en las próximas horas, según fuentes consultadas.
Con la presentación de la denuncia "agrega el comunicado", se iniciará un período de consultas de 60 días donde Estados Unidos deberá responder el cuestionamiento argentino y, si las respuestas no fueran satisfactorias, Argentina exigirá la conformación de un panel de expertos que analizará las prácticas proteccionistas denunciadas.
Lo mismo ocurrirá al revés, es decir, con las denuncias realizadas por separado por Estados Unidos y Japón. Habrá consultas de uno y otro lado y si no hay acuerdo en esas instancias de mediación, todos los países podrán pedir la apertura del panel para discutir a fondo la cuestión y esperar una definición por parte de la OMC.
En el caso de Europa, las consultas ya terminaron y el mes próximo comenzaría la discusión en el panel, pero este proceso podría durar hasta un año y si, eventualmente, el órgano multilateral llegara a fallar contra la Argentina, el país tendría la opción de apelar, con lo cual ganaría otro año más, aseguran los expertos.
El embajador argentino en los Estados Unidos, Jorge Argüello, afirmó que "no resulta razonable que los países cuyas economías están más desarrolladas exijan a los países en desarrollo el cumplimiento de normas de comercio internacional que ellos mismos no cumplen". "La Argentina es el primer productor mundial de limones. Vendemos limones a Europa, Asia y África. Sin embargo, ni un solo limón argentino puede ingresar al mercado estadounidense. Eso es proteccionismo", manifestó el embajador.
Con respecto a las carnes, el comunicado de Cancillería afirma que si bien la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) reconoce desde 2003 a la Patagonia Sur como zona de libre aftosa sin vacunación, EE.UU. "se ha hecho eco de lobbies proteccionistas y ha dilatado el proceso de reconocimiento de esta situación".
La Argentina ya había acudido a la OMC a principios del mes pasado contra los Estados Unidos y Japón por las limitaciones para exportar carnes y limones. Pero se trató de quejas ante el Comité de Medidas Sanitarias. Ahora se reclamó abrir las consultas para solucionar las controversias.
Por otra parte, el viernes pasado el Gobierno acudió al órgano para pedir consultas a la UE sobre restricciones aplicadas por España a las importaciones de biodiesel.
Consultado al respecto, Gustavo Idígoras, experto en la materia y titular de la consultora BIM, valoró el "cambio de actitud del Gobierno", en torno a reclamos históricos de acceso a mercados, ya que el país "siempre tuvo una postura muy pasiva en la OMC ante las restricciones que imponen otros mercados".