La falta de condiciones adecuadas para la implantación del cultivo demora la incorporación de lotes sobre el norte santafesino, en donde sólo se relevaron siembras aisladas. En paralelo, lluvias registradas durante los últimos siete días permitieron comenzar la siembra de cuadros puntuales en las regiones Núcleo Norte y Sur, que se suman a las hectáreas ya implantadas sobre el Centro-Este de Entre Ríos, Centro-Norte de Santa Fe y Corrientes.
Alejadas de la región litoral, durante las últimas semanas también se releva la incorporación de lotes bajo riego en las provincia de San Luis y en la región NOA. De esta forma, la siembra a nivel nacional logró cubrir un 1,1 % de la superficie aún proyectada en 3.560.000 hectáreas para la campaña en curso. El actual avance de siembra permite calcular un leve progreso intersemanal de 0,8 %, al mismo tiempo que refleja un retraso interanual de -1.1 %.
Sobre las regiones Núcleo Norte y Sur, luego de registrarse lluvias de escasa intensidad durante el pasado fin de semana, la condición hídrica varía de regular a buena, y ello fue suficiente para comenzar con la incorporación de las primeras siembras tempranas. Durante los próximos días se esperan lluvias de mayor caudal, que continuarían reabasteciendo las reservas hídricas de los cuadros en ambas regiones.
No obstante, según nuestro informe climático, junto con el frente de tormenta se producirá la entrada de una masa de aire polar que hará descender las temperaturas por debajo de lo normal, provocando el riesgo de heladas en el centro y sur del área agrícola.
En consecuencia, si bien la recuperación hídrica podría brindar fluidez a la siembra sobre el núcleo maicero, las bajas temperaturas previstas también podrían demorar no sólo los nacimientos en lotes sino también la decisión de comenzar con una fluida incorporación de lotes.
Por último, la actual proyección refleja una merma interanual del -3,2 % (siembra 2012/13: 3.678.000 Ha), que se explica en gran medida debido a los costos de implantación, precios de mercado y a una gran superficie agrícola que no ha definido arrendamientos a la fecha. La combinación de estos tres factores podría continuar impactando de forma negativa sobre la decisión de siembra durante los próximos meses, generando mayores reducción sobre el área que finalmente podría ocupar este importante cereal de verano.
