Un plan estratégico para garantizar el acceso de transporte terrestre y fluvial al cluster de molienda del Gran Rosario, uno de los más importantes del mundo y que concentra el procesamiento de casi el 80% de la cosecha argentina, fue consensuado por distintas entidades. De la elaboración de la propuesta participaron la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), la Cámara de Actividades Portuarias y Marítimas de Rosario y Ferrocámaras, además de otras asociaciones de la región.
Canalizaron una propuesta de obras y "soluciones alcanzables y realizables en el corto plazo para mejorar los accesos terrestres del transporte vial y ferroviario de cargas a las industrias y terminales portuarias ubicadas en el área metropolitana de Rosario". Se trata de los 70 kilómetros que van de Arroyo Seco (en el punto más al sur) hasta Timbúes en el norte de esta zona clave para la agroindustria argentina.
"Entre otras medidas, se propone ampliar las playas de estacionamiento para los vagones ferroviarios, construir autopistas estratégicas (rutas nacionales 33, 012 y 34) y autovías en los accesos a las terminales portuarias, por donde circulan más de 3 millones de camiones", explicó un informe sobre la propuesta que coordinaron Alejandro Calvo, Julio Calzada y Alfredo Sesé, de la Bolsa rosarina.
El nudo logístico de cargas de relevancia mundial se produce porque la Argentina es el primer exportador mundial de harina y aceite de soja, el tercero de poroto de soja y el cuarto de aceite de girasol.
En las terminales portuarias del Gran Rosario se concentra, aproximadamente, el 77% de la capacidad instalada de la industria aceitera y se procesan 159.500 toneladas diarias, según datos de la Bolsa rosarina (BCR) mientras que el total nacional es de 206.931 toneladas diarias.
Por su parte, en estos 70 kilómetros de la hidrovía Paraná - Paraguay están radicadas 29 terminales portuarias, de las cuales 19 despachan granos, aceites y subproductos.
La larga cola es interminable: el año pasado ingresaron 1,5 millón de camiones que transportaron 42 millones de toneladas, con picos de entre 7.000 y 10.000 unidades diarios en las semanas de mayor movimiento, después de la cosecha: Ida y vuelta a los puertos es un tráfico de 3 millones de camiones anuales.
Para desatar el nudo, la propuesta es convertir en autovía o autopista la ruta nacional 012, que recorre en forma de abanico toda esta región portuaria. Otro punto central es hacer autovías en dos rutas nacionales que concentran muchos camiones: la 33, que baja hacia Rufino en el extremo sur de Santa Fe, y la 34, al menos hasta Sunchales en el corazón de la cuenca lechera. Esta última es una de las rutas más "cargadas" del país, ya que suele ser el camino para bajar los granos del NOA y mover la producción láctea.
En cuanto a las obras ferroviarias, el plan propone la ampliación de varias playas de estacionamiento, como la de estación Cerana en Puerto General San Martín y la de San Lorenzo, entre otras, para las formaciones ferroviarias que llegan a los puertos.