Según fuentes del sector agropecuario, la cosecha de té disminuyó un 35% respecto del año pasado, como consecuencia del incumplimiento de precios y los bajos rindes. La baja en la producción de esta infusión es similar a la caída en la soja, maíz y maní, aunque estos últimos se debe a la sequía y a la falta de acompañamiento de políticas por parte del Gobierno Nacional y bonaerense.
Las grandes empresas exportadores fueron las que más se acercaron a esos valores. Según los productores, pagaron alrededor de 1,65 pesos mientras que los secaderos más chicos pagaron entre 1,10 y 1,20, con la incertidumbre de que muchos de ellos pagaron solo un adelanto y no hay certezas si van a poder cubrir los saldos pendientes.
Los productores estimaron una caída de entre el 30 y 35% y se lo atribuyen a una plaga especifica: el ácaro. El productor se mostró muy preocupado por los persistentes ataques, y aseguran que en la última cosecha fueron más graves que en años anteriores. Desde el inicio de la cosecha (en octubre) hasta el último día de 2017 fue de 1,65 pesos por kilo; desde el 1 de enero al 28 de febrero, fue de 1,79 pesos y desde el 1 de marzo hasta el final, de 1,93 pesos.
En tanto, la elevada cotización del dólar influyó en el precio oficial del brote verde, establecido por el Ministerio de Agricultura de la Provincia de Misiones.