En Argentina el 80% de la carga se transporta por camiones, por lo que las modificaciones en el valor de los combustibles impacta en los costos, algo que se traslada al valor de los productos y, de manera silenciosa, termina impactando en la inflación.
Mientras desde el Gobierno el discurso está centrado en bajar el costo logístico, los operadores y transportistas señalan que la presión que tiene la suba del gasoil va en camino contrario.
"Aún estamos haciendo números, pero si el aumento del gasoil es del 6% esto implicará una suba de 2% de los costos de una operación logística. Ahora, estos son números de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, en el interior el aumento es mayor por lo que la incidencia será más alta", explicó uno de los operadores logísticos más importantes.
Durante octubre pasado, cuando el mercado de la naftas fue liberado, las petroleras aumentaron 11,5% el valor del combustible en el mercado mayorista, en ese momento, el incremento impacto en una suba de alrededor de 5%.
Lo mismo sucede con las empresas transportistas que vienen anunciando que no pueden absorber nuevos aumentos. Según un informe de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac), previo a este nuevo aumento Argentina ya poseía el segundo valor más alto de gasoil en la región, 9% más caro que Brasil; sólo superado por Uruguay (+25%), el más costoso de la región.
En ese contexto, desde Fadeeac explicaron que hasta octubre pasado poner en movimiento un camión requirió de un 2,65% más de inversión y que en 2017, los peajes incrementaron un 39,7 %, y el gasoil un 22%, pero si se le suma este nuevo incremento, la versión más barata acumula un alza de 28,6% mientras que la premium ya subió 29,8% en estos 12 meses.
El gasoil además es fundamental para levantar las cosechas. Según los datos del Departamento de Economía de Coninagro, los productores necesitarán $ 3018 millones más para cubrir los costos que tranqueras adentro y en transporte generan estas alzas.
La agricultura utiliza 1034 millones de litros de gasoil, combustible que pasó de $ 16,1 en junio a $ 19,94 el litro en diciembre, esto implica un gasto de $ 20.617 millones, lo que se estima en una suba de $ 1448 millones sobre lo esperado.
El otro problema es que los transportistas renegociaron tarifas para el campo hasta el 1 de febrero, pero lo hicieron en la previa del incremento de octubre, por lo que se espera un nuevo ajuste de la tarifa por kilómetro.