En el 2016, ¿Podríamos estar hablando del “Año del Maíz?”. La curiosidad se nos disparó espontánea, después que Martín Fraguío nos hiciera unos cálculos que le permitieron trazar una hipótesis de saldo exportable récord del cereal para el año que viene.
El Director Ejecutivo de Maizar, la entidad que nuclea a eslabones de las cadenas del maíz y del sorgo, había estado contando “los porotos”: “tenemos el “carry-over” (remanente) de maíz más grande de la historia, entre siete y 10 millones de toneladas del 2015 e incluso algo del 2014 y con un nivel de precios que hoy defino “tirante”. A eso hay que sumarle la cosecha que viene”.
Fraguío casi no tiene dudas de que va a haber un volumen exportable realmente importante, sobre todo si –como ha prometido el Presidente electo, Mauricio Macri- se suprimirán los ROE y se bajarán o eliminarán las retenciones del maíz. Por lo pronto, en los últimos 30 días, se percibió un cambio de expectativas entre productores y técnicos y por eso han mejorado las intenciones de siembras tardías, con lo cual el área implantada terminaría con una extensión muy diferente a la que se estimaba hace 3 meses, cuando se censaban caídas de entre el 30 y hasta el 50 % en distintas zonas del país.
Estimaciones
En Córdoba, nomas, la Bolsa de Cereales de Córdoba proyectaba una merma del 39 por ciento. Ahora, el Secretario de Agricultura de la Provincia, Juan Cruz Molina, cree que se puede llegar igualar la superficie de la campaña pasada, de “entre 1.300.000 y 1.400.000 hectáreas”, nos dijo.
Con ambos conversamos en la reciente Segunda Convención del Maíz, efectuada en la capital cordobesa.
Con un saldo exportable bastante por arriba de los 20 millones de toneladas, arrimándose quizás a 30 millones, ¿tenemos realmente posibilidades, capacidad y clientes para colocar esa cantidad de mercadería?
Fraguío opina que sí. Y brinda varias razones:
1) Argentina vende, actualmente y a pesar del desmanejo comercial que ha hecho el gobierno que se va, a 80 destinos;
2) Ucrania –donde el directivo estuvo hace un par de meses- va a tener una caída de cosecha de unos ocho millones de toneladas (de 28/29 millones a 20,5 a 21 millones) y de sus exportaciones;
3) Se espera una caída de área en Brasil.
En consecuencia, la Argentina “podría” estar supliendo o ganando volúmenes que no cubrirían los otros exportadores. Con ese panorama “deberíamos andar bien”, confía el director ejecutivo de Maizar.
-Martín, conforme a lo que me contas, ¿de repente podríamos estar hablando del “Año del Maíz” para la Argentina, después de todo lo que nos pasó?
-Me encantaría, sería increíble hablar de una exportación récord-.