“Las medidas contra nuestro sector, no las padece otro”
Raúl Cata, presidente de APL declaró no entender por qué en su sector se están ejecutando políticas “tan desatinadas”
El presidente de la Asociación de Productores de Leche (APL) habló de las medidas del Secretario de Comercio Interior, Mariano Moreno, ironizando que su sector está “privilegiado” y que desde el 2005 las "medidas que acumula este gobierno contra nuestro rubro, no las padece otro". “Somos un sector tan grande e importante como el automotriz. No somos una porción pequeña de la economía, tenemos actores importantes y aun así, todo nos juega en contra”.
En dialogo con el programa radial Ondas de Campo ayer, el productor resaltó que por primera vez y de manera pública, el vice presidente del Centro de la Industria Lechera (CIL), Ricardo James, planteara los problemas que tiene el sector lácteo para exportar. Lo hizo en el Congreso de la nación, el jueves pasado. “Esa es una buena señal: no todos los empresarios están acobardados”.
Sobre las declaraciones de Miguel Paulon, presidente de CIL, quien dijo que así como venían las autorizaciones para exportar, hubo diferencias con los tiempos porque antes salían en 14 o 20 días, pero en este caso, superaron el mes. Algo que se puede interpretar como un retraso importante y un golpe para el sector. De eso, Cata indicó que espera que CIL también siga en la línea de manifestarse públicamente con la verdad, porque en los últimos años aquella entidad “nunca ha planteado la problemática. Incluso, desde la producción, les hemos dicho que somos nosotros quienes hemos hecho públicos los problemas del sector: '¿Por qué no hablan ustedes junto con nosotros?' No hemos podido hacerlo, excepto cuando se intentó generar una ley de lechería hace algunos años atrás”.
Él productor sustuvo que el sentimiento que le produce las declaraciones de Paulon, es de alegría por haberlo manifestado ya que la problemática de la lechería “está en una baja, respecto al año pasado, del 12%. Eso porque nuestras señales comerciales son malas. Hemos tenido los precios congelados durante casi 2 años (de $1.50, un poco menos), en el sector primario. Y en la góndola no pasa eso. El consumidor argentino paga precios similares que el consumidor europeo, lo que permitía pagar ampliamente un precio por sobre los $2.50, de acuerdo a lo que paga el consumidor, pensando que hoy los costos están bastante arriba de los 2 pesos”.
El precio de la leche en polvo entera está en 6 mil dólares la tonelada y hace un año estaba en U$S3.200. “Creo que con la necesidad de divisas que tiene el país, con las señales claras que hacen falta para que podamos salir de este estancamiento, y cometer esas torpezas (…) Me parece que es un factor que tenemos que mirar bajo la lupa: por qué – el gobierno - lo hace, con qué razón lo hace, cómo lo hace. Creo que hay un trabajo para el periodismo de investigación de desvelar esas dudas”.
Cata no es positivo al mirar el sector desde el año 2005, época en que “ha sido destruido sistemáticamente el secor, cuando pusieron retenciones y después pusieron precio de corte y llegando a una retención mayor al 50% del producto. Aberrante” y comparó las realidades de Argentina, versus el desarrollo de la industria láctea de Uruguay, que tiene “el precio adecuado para el productor, con las ganancias de sus empresas. No entendemos por qué están llevando a cabo políticas tan desatinadas”.
Cata sostuvo que desde la Mesa Nacional que integran 14 entidades, se lo han manifestado claramente desde hace dos años al subsecretario de Lechería, planteándole 23 puntos que deben corregirse, “los que, por supuesto, no se corrigieron”.
"Probablemente la sociedad no se da cuenta de lo que pasa, pero la mitad de la leche se produce sobre tierra alquilada y hay que competir con la agricultura para pagar el alquiler de esa tierra". De esto, añade "cuando un productor decide salir del negocio, porque la situación de quebranto lo obliga, él, de alguna manera, arregla sus cuentas. Perdiendo el capital hacienda, deja de alquilar ese porcentaje de tierras del 40% y se sigue arreglando con su 60% restante. Probablemente pasa a ser un rentista”. De esta manera, Cata señala un problema social importante: “esto genera una pérdida de 10 veces más mano de obra que usamos por hectárea que la agricultura, y que generamos un conflicto serio a las economías regionales porque esa gente (que perdió un trabajo que tiene como características ser pesado, complejo y difícil) emigra a las áreas suburbanas. No saben hacer otra cosa que trabajar así, por lo tanto en el conurbano van a vivir mal o hacer vivir mal al resto porque, muchas veces, es gente que no tiene cómo vivir y empieza a integrar el grupo de inseguridad”.
A cerca de la desinformación que se tiene del sector, Cata se muestra optimista y cree que eso está cambiando puesto que “en varios sectores se ven los conflictos y el gobierno no puede manejarlos. Se está viendo la decadencia que está sufriendo el país en varias áreas”.