Bolsa de Rosario invierte $ 300 millones en banco para Pymes que atienda al agro

La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) invertirá $ 300 millones de capital inicial para crear un banco comercial para Pymes con foco regional en Rosario, y desde ahí atender las necesidades de la Banca Empresas, en especial todo lo relacionado con lo agropecuaria y lo agroindustrial, que es muy fuerte en el interior, con el propósito de financiar al sector.

La BCR lo hará junto a sus mercados adheridos (Mercado Argentino de Valores, Rofex, Argentina Clearing y Rosgan) y las compañías de seguro que integran Aseguradoras del Interior de la República Argentina (ADIRA).

Asimismo, el proyecto prevé que, en el más corto plazo posible, las acciones del nuevo banco tengan oferta pública para facilitar la entrada y salida de nuevos accionistas.

El objetivo es favorecer no sólo a los mercados que forman parte de la institución, sino a las actividades económicas de la Región Centro en la que tiene una fuerte presencia institucional y comercial.

"Se aprobó la autorización de la asamblea, así que ahora empezaremos a hacer el trabajo fino de presentar toda la documentación y los requisitos al Banco Central, con la intención de poder inaugurar el año próximo", anticipa Javier Cervio, gerente ejecutivo de la BCR. El presidente de la Bolsa, Alberto Padoán, señala que "Rosario y su zona de influencia no cuentan, desde hace ya muchos años, con un banco de capitales privados cuyo órgano máximo de decisión esté radicado en la región, e integrado por personas que conozcan las necesidades, los negocios y a los propios empresarios que desarrollan aquí su actividad económica".

¿Se disuelve el GFV? Por otra parte, tal como había anticipado este diario, el Grupo Financiero Valores (GFV) eligió como presidente a Mario Rossi y como vicepresidente a Sebastián Salaber, mientras Alberto Longo Elía, Juan Pablo De Bari y Horacio Bonavia asumieron como directores.

El tema es ver cuánto tiempo más durará el GFV, ya que una de las visiones que prima en el nuevo directorio es no tener estructuras intermedias entre el accionista y sus activos (banco de Valores), ya que la intención es acercar al propietario a lo que el propietario es dueño.

"La estructura intermedia te burocratiza, entonces ahora lo que queremos ver es si hay alguna razón contable, impositiva o financiera para mantener al grupo. De lo contrario, ver la forma de ir disolviéndolo, ya que es un directorio de un directorio.

Si bien está en la naturaleza de todo ser humano justificar su posición y su puesto, estar sirve si se puede agregar algún valor, así que vamos a hacer lo que mejor convenga al accionista", revelan en el board en off de record.

La visión de los próximos meses es analizar si la estructura intermedia de holding agrega algún valor al accionista o, en caso de que así no sea, que desaparezca, y que quede cotizando en la Bolsa solamente el Banco de Valores, pero aseguran que no cambiará nada.

La conducción anterior del GFV, que perdió la reñida elección y decidió retirarse, apostaba a invertir en nuevos negocios.