Las importaciones suman u$s1.200 millones
Las importaciones de agosto estuvieron por encima del promedio anual, lo que indica la estabilización en un nuevo nivel importador.
A principios del mes de septiembre, el titular de la cartera del Ministerio del Interior, Rogelio Frigerio, aseguró que "no hay ninguna estadística macroeconómica que determine que haya un incremento de las importaciones significativo" y agregó que "seguramente hay sectores muy sensibles que la están pasando mal, para los que las importaciones de algún producto puede generar que se pierda empleo y eso no lo vamos a permitir: esos sectores van a tener una atención especial porque esta es la indicación del presidente".
La realidad, como muchas veces sucede, es un poco más compleja. Los datos oficiales de INDEC muestran que en los ocho primeros meses del año las importaciones de 2016 se redujeron un 7,6% con respecto al mismo período del año pasado. Sin embargo, la razón fundamental de esa reducción está dada por la caída de la actividad, y la consecuente reducción de productos intermedios. Así, las compras al exterior de suministros industriales cayeron un 15,9% y las piezas y accesorios para bienes de capital un 12,3%; ambos rubros explican gran parte de la caída total. El otro rubro más significativo es la importación de combustibles y lubricantes, que cayó un 27,3%.
Pero mientras estos rubros cayeron, todos los asociados a productos finales han aumentado. Entre ellos alimentos, incluyendo tanto los elaborados, como los básicos. Por ello, las estadísticas oficiales indican que en los últimos meses ingresaron al país miles de toneladas de productos significativos de la canasta de alimentos las cuales, sumado al incremento de costos, incrementan la preocupación de miles de productores los cuales ven amenazados la competitividad y puestos de trabajo de sus producciones.
En primer lugar, debe mencionarse la importación de carne de cerdo, y sus derivados. En los ocho primeros meses ya se acumularon importaciones por 13.344 toneladas de carne porcina congelada según los datos de INDEC. Comparada con las importaciones en igual período del año pasado, que fueron de 6.930 toneladas, representa un aumento del 93%. Este aumento se sigue acentuando, ya que en agosto el aumento fue del 149% con respecto al mismo mes del año pasado. Senasa tiene algunos datos diferentes de INDEC, además de que todavía no publicaron los de agosto, pero cuando se observa la variación los resultados son similares.
Sin duda, otro de los sectores productores de alimentos con mayor preocupación, es el frutihortícola el cual tiene un impacto muy fuerte en lo que a puestos de trabajo refiere.
A diferencia del año 2015, tres frutas del complejo citrícolas –naranjas, mandarinas y pomelos- verifican altos volúmenes de importaciones en los primeros meses del año. Así las naranjas, mandarinas y pomelos experimentan importaciones en los primeros ocho meses del año por 3.566, 44 y 1.239 toneladas, respectivamente, provenientes de Chile en el caso de los pomelos, Uruguay las mandarinas y principalmente España las naranjas.
Frutas como el kiwi y la ciruela también registraron importaciones por valores muy superiores a los del año pasado. En el primer caso las importaciones de Chile e Italia en 2016 fueron un 23% mayor que los ochos meses del 2015 y en el segundo las importaciones de Chile 749% más en el mismo periodo.
Respecto a la producción hortícola, hasta el mes de agosto del corriente año, las importaciones de cebollas y espárragos frescos se incrementaron un 270% y un 67% respectivamente en relación al mismo periodo del año anterior. Las zanahorias, batatas y tomates frescos que en los primeros ocho meses del año 2015 no registraron importaciones, alcanzaron las 8.688, 4.508 y 1.565 toneladas respectivamente en lo que va del año.
Si bien históricamente Argentina ha sido de los principales productores mundiales de alimentos contando con una diversidad de producciones muy importante, hoy en día es receptora de significativos volúmenes de productos en la canasta básica de alimentos.