Garantizar la preñez, clave en rodeos de carne
El factor más importante que condiciona la capacidad de las vacas de cría para quedar preñadas es la reanudación de la actividad cíclica después del parto
La evaluación de los servicios en los rodeos de carne es un punto de partida para determinar resultados de preñez y realizar un eficiente manejo de los distintos lotes, de acuerdo a la edad gestacional. Nos permite, además, el análisis de los factores que intervienen y condicionan estos resultados y elaborar un programa de trabajo para mejorarlos. A su vez, contribuyen a eliminar las vacas vacías en forma temprana, debido a que resulta muy caro tener una vaca durante el invierno sin que produzca un ternero.
Hoy es posible, desde el punto de vista técnico y económico, realizar este diagnóstico 30 días después de finalizado el servicio, a través del uso de la ultrasonografía (ecografía), o a los 60 días mediante el tradicional tacto rectal. También se pueden combinar estos dos métodos de diagnóstico para realizarlo de manera precoz y económica.
Factores para analizar
El factor más importante que condiciona la capacidad de las vacas de cría para quedar preñadas es la reanudación de la actividad cíclica después del parto. Sin duda que también es importante que los celos que ocurren en estos ciclos sean fértiles y que el toro que la cubre sea hábil y fértil.
El desempeño reproductivo de un rodeo de carne está en función del retorno temprano a la ciclicidad después del parto y de las altas tasas de concepción durante estos ciclos tempranos. Los factores que contribuyen a la ciclicidad después del parto son:
1. Tiempo desde la parición.
2. Condición corporal de las vacas al parto.
3. Ganancia de peso en las primeras semanas posparto.
4. Amamantamiento.
5. Edad de las vacas.
6. Presencia de los toros.
7. Sanidad.
Las tasas de preñez, en ausencia de enfermedades, son el producto de la fertilidad de la vaca y la fertilidad del toro.
La fertilidad de la vaca está influida, en gran medida, por el tiempo del parto al servicio y por los cambios de peso cercanos a la temporada de servicios.
Por su parte, la fertilidad del toro puede ser estimada por un examen en base a la circunferencia escrotal y calidad del semen. También, la habilidad de monta y capacidad de servicio condicionan la fertilidad del toro y pueden ser evaluadas.
El período de parición y el tiempo transcurrido desde la parición al servicio tiene una marcada influencia en la presentación de los celos y en la fertilidad de los mismos. En rodeos sin problemas de alimentación y salud encontraremos, seguramente, un 30 por ciento de celos a los 40 días del parto y cerca del ciento por ciento estará en celo a los 90 días después del parto.
La única manera de asegurarse que las vacas tengan un adecuado tiempo de posparto para ciclar es realizar períodos de servicios cortos, que se traducirán en períodos cortos de parición.
En una primera impresión, parecería que un período de servicio más largo daría más tiempo a las vacas para quedar preñadas. Cabe recordar que en todos los casos, estamos trabajando con un objetivo de un ternero por vaca por año. Por lo tanto, las vacas que conciben tarde en este período estarán en desventaja para el período de servicio del año siguiente.
Obtener vacas que tengan sus crías más temprano tiene otras ventajas. Probablemente, la más importante es que el ternero promedio será de mayor edad. Teniendo en cuenta que la edad del ternero es un determinante importante del peso al destete, la parición temprana produce mayor cantidad de kilogramos. Por cada celo en que no se logra preñez, se pierden de entre 25 a 30 kilos de peso del ternero al destete, y se disminuye la posibilidad de preñez temprana al año próximo.
Qué hacer con la vaca vacía
Descartar y vender todas las vacas vacías después del diagnóstico de preñez debería constituir una práctica corriente, incorporada a la rutina de manejo de todo establecimiento de cría. Esta medida nos permitiría seleccionar por fertilidad en el rodeo.
Los vientres de descarte pueden ser castrados para facilitar el manejo de los mismos y mejorar la calidad de la res.
Si los índices de preñez del campo son históricamente bajos, habría que trabajar para mejorarlos. Los problemas pueden ser de índole sanitaria, nutricional o de manejo. Estas ineficiencias no deben ser disimuladas con servicios complementarios o largos.
Programa de eficiencia
El análisis de los principales factores que influencian el comportamiento reproductivo del ganado de carne permite la formulación de un programa para maximizar la eficiencia reproductiva.
Las metas de un programa real deben ser establecidas con precisión en el tiempo. Un objetivo final de 95 por ciento de preñez durante un período de servicio de 60 días es alto pero alcanzable.
Para alcanzar este resultado un 65 a un 75 por ciento de las vacas deberían parir en los primeros 21 días de la época de parición. Para que esto ocurra se necesita que el 95 al ciento por ciento de las vacas muestren signos de celo en los primeros 21 días de la época de servicio y tasas de concepción de entre el 70 y el 80 por ciento. Obviamente, esto requerirá una alta fertilidad del toro y de la vaca.
Considerando los principales factores que contribuyen a altos porcentajes de preñez (ciclicidad, fertilidad del toro, fertilidad de la vaca, estado nutricional), debe recordarse que los factores se multiplican, no se suman.
Esto significa que un factor no muy importante tiene una influencia muy negativa en el resultado total. El desempeño total nunca será más alto que la variable más baja.
Consejos para mejorar la reproductividad
Manteniendo los principios enunciados, un programa para maximizar la eficiencia reproductiva en un rodeo de cría debería considerar las siguientes medidas.
1. Un período de servicio de 60 días.
2. Uso de un programa nutricional para asegurarse de que las vacas estén en condición corporal 'buena' al comienzo de la parición, y ganen peso antes de la época de servicio y por las tres primeras semanas de servicio.
3. Manejo de un programa sanitario acorde al establecimiento.
4. Destetar en forma temporaria los terneros por 72 horas al comienzo de la temporada de servicio o utilizar la herramienta del destete precoz.
5. Utilizar sólo toros fértiles (circunferencia escrotal de más 32 centímetros y semen con más del 70 por ciento de espermatozoides normales).
6. Eliminar las vacas vacías.
7. Selección de las vaquillonas preservicio.
Fuente: Humberto Tríbulo y Leonel Alisio. 2001. Rev. de la Soc. Rural de Jesús María. 126:22-23.