Lo que no podes dejar de saber
La semana tuvo de todo: cierre de exportaciones, calorcito, nuevas lluvias que complican la siembra y el desplome del precio de los granos en Chicago son algunos de los títulos más relevantes
...que a pesar de que la semana fue nuevamente corta, por el traslado al lunes de la conmemoración sanmartiniana, en los cuatro días restantes hubo de todo y para todos los gustos. Desde la renovada restricción a las exportaciones de carne (que ya no se exporta, pero que las autoridades parece que no lo saben), un inédito calor veraniego en pleno invierno, más nuevas lluvias (que vuelven a complicar siembras y caminos), pasando por la profundización del desplome de los precios de los granos en Chicago y, especialmente, el enrarecimiento político a partir de los cambios alrededor del tema Griesa-holdouts que desequilibró fuertemente los mercados.
Parte de estos temas se conversaron en las sendas recepciones de las Bolsas. La de Comercio realizó su retrasado festejo por el 160º aniversario de la entidad (una de las más antiguas, apenas un año más joven que la propia Constitución nacional, como destacó su titular, Adelmo Gabbi), que debía realizarse a principios de agosto (entonces lo había suspendido, a último momento, la Casa de Gobierno).
Ahora, naturalmente, la presencia de la presidente Cristina de Kirchner generó un revuelo especial, aunque bastante lejos del habitual e, incluso, no alcanzó para tapar bastantes ausencias, que dejaron al recinto principal a medio llenar. La otra Bolsa que celebró fue la de Comercio de Rosario, que conmemoró anoche sus 130 años, y también dio bastante que hablar por la cantidad de empresarios de distintos rubros concentrados en el principal polo agroindustrial del país.
… que los temas, si bien variados, se concentraron en los dos o tres más urgentes. Uno, casi desinflado sobre el fin de la semana, pero que provocó escozor en los primeros días, fue la afirmación oficial (luego desmentida) de la aplicación de la Ley Antiterrorista a empresarios. La segunda, mucho más firme, fue el reflote de la controvertida Ley de Abastecimiento (de 1974), unánimemente rechazada por todos los sectores, y que aún no se sabe qué destino final correrá tras su paso por el Congreso.
En medio, los productores sacando cada vez más cuentas, que siguen sin cerrar. De hecho, las estimaciones de AACREA señalan que más del 90% de los distritos maiceros no serán rentables en la actual campaña (seguirán insistiendo, ahora, con los 32 millones de toneladas de cosecha -que nadie encuentra-, y los 6 millones de hectáreas sembradas, como en las dos campañas anteriores o, finalmente, ¿se blanquearán los datos?). De hecho, ya se habla de una caída del área maicera superior al 10%. Lo que no se sabe es cual es la superficie de referencia: ¿34,6 millones de hectáreas (privados), o 6 millones de hectáreas (oficial)?.
Lo grave es que en menor medida, la caída alcanzaría esta vez a la soja que también podría bajar en su superficie de siembra ante la escasa renta y el alto costo de los fletes. Y, aunque los precios internos están firmes, y los internacionales más aún (ver nota de tapa), los 8 meses consecutivos con faena de hembras superior a 43% (porcentaje considerado de equilibrio), da cuenta que tampoco la ganadería está pasando por su mejor momento, situación que solo se puede revertir si los precios internos siguen en ascenso.
Sin embargo, las nuevas restricciones a las exportaciones estarían indicando que el Gobierno prefiere profundizar el viejo modelo, aunque hasta ahora no le haya dado resultados. De hecho, el anterior cierre de las exportaciones (presidencia de Néstor Kirchner, en marzo de 2006) fue el que provocó la brutal liquidación ganadera de mediados de la década pasada que hizo perder casi 12 millones de cabezas vacunas, y que los precios de la carne al consumo interno volaran hasta el equivalente de casi U$S 3 por kilo vivo (ahora ronda U$S 1,8-2).
…que otro tema incomprensible es el mantenimiento de las restricciones para exportar maíz. Es que si es cierto que hubo 32 millones de toneladas de cosecha tanto este año como el anterior (total = 64 millones), no se justifica que no se abran totalmente las exportaciones del cereal del que, internamente, se usan apenas 7-8 millones de toneladas.
También, según se escuchaba en los corrillos de las bolsas de Buenos Aires y de Rosario, sorprende la firmeza interna de los precios de la soja, al punto que se independizan de las cotizaciones internacionales, y tampoco son acordes con la “cosecha récord” que pregonan algunos.
En medio de tanto dato duro hubo, sin embargo, lugar también para un recuerdo al titular de La Serenísima, Pascual Mastellone, recientemente desaparecido y a quien se le reconoce que, a pesar de haber actuado al límite más de una vez, ser el “padre de la lechería moderna”, provocando su transformación estructural a partir de los ´60-´70.