Japón

Importa menos volúmenes de limones

El importante mercado asiático promueve la producción local. El país no tiene tanta dependencia de los productos cítricos

14 Jul 2014

Japón es un mercado interesante para cualquier proveedor dado su gran tamaño (127 millones de habitantes), elevado poder adquisitivo (90% es clase media) y precios atractivos que se pagan. Además, en los alimentos depende de las importaciones. Su producción local sólo alcanza para cubrir el 40% de sus necesidades.

Pero en caso de los cítricos la dependencia con lo importado no es tan grande, dado que Japón tiene una gran producción local de mandarinas. Anualmente se cosechan 900.000 toneladas (t) de mandarinas “Mikan” y similares. Pero esta producción está sufriendo un fuerte retroceso ante al abandono de cultivos, reemplazo por otros más rentables y el envejecimiento de los agricultores. El 60% tiene más de 65 años, y a esa edad les cuesta cosechar la mandarina que crece en las laderas. Hace unos 15 años, la producción superaba el 1,5 millón de toneladas y, hoy, es menos de un millón. La producción de otros cítricos es muy pequeña: 15.000 t de limón y 5.000 t de naranjas.

Para completar la producción local se importan anualmente unas 350.000 toneladas. Casi la mitad corresponde al pomelo. Los japoneses son grandes consumidores de esta fruta, a pesar que no se la cultiva localmente. Los grandes proveedores de pomelo son EEUU (110.000 t) y en contra estación Sudáfrica (40.000 t). Le sigue en importancia las naranjas. Dada la limitada producción local, tiene que importar casi todo lo que consume. También en este caso el principal proveedor es EEUU (100.000 t) y en contra estación Australia (30.000 t). De limones importan unas 35.000 t de EEUU, y 12.000 t de Chile. De mandarina se importa muy poco, debido a que durante gran parte del año se aprovisiona de su propia producción. También EEUU es el principal proveedor. Envía al año unas 15.000 t de “Mineolas”. Australia aporta unas 2.000 t de “Murcott”.

En caso de los cítricos dulces hay una tendencia creciente de los volúmenes importados, en especial en mandarina: el aumento en los últimos años es marcado. Para el limón la tendencia es decreciente, ya que Japón está fomentando la producción local, sustituyendo así a las importaciones.