Los rendimientos relevados se mantienen en los promedios históricos en las zonas oeste y centro de Buenos Aires, el norte de La Pampa y la Cuenca del Salado, mientras que hay numerosos lotes con anegamientos y falta de piso, además de que las enfermedades de panoja siguen incrementándose en las zonas más afectadas.
Los mayores avances de cosecha se dieron en Entre Ríos, Santiago del Estero y Córdoba, provincia donde la recolección se concentró en los lotes ubicados en terrenos elevados y en la que aún resta recoger 5 por ciento de los cuadros, que se encuentran en su mayoría con problemas de anegamientos.
En tanto, en el centro-norte de Santa Fe continúa la demora en la cosecha y falta recolectar más de 1.000 hectáreas del cereal de verano; mientras que en las zona oeste de Buenos Aires y norte de La Pampa, Cuenca del Salado y centro bonaerense, los rendimientos se mantienen en los promedios históricos para esas áreas.
Asimismo, la falta de piso y la imposibilidad de transitar los caminos sigue marcando una extensa demora en la recolección.
En la zona del NOA, luego de recolectar 75 por ciento del área apta, el rinde zonal se ubica en 37,3 quintales por hectárea y en la región del NEA las labores avanzan a ritmo lento, ya que los productores están abocados a la cosecha de maíz.
Por último, en el oeste de Chaco y el este de Santiago del Estero aún se registran pérdidas de superficie parciales producto del ataque de aves.